El canto de la bestia

Largos cabellos rubios cubrían el rostro de esa hermosa criatura. Levantó su pálida mano y apartó los mechones dejando al descubierto un hermoso rostro iluminado de una falsa inocencia. Pestañeó con picardía ocultando unos cristalinos ojos y se mojó los labios de un sabor salado. Se fijó en que los pechos los llevaba al descubierto y solo era cubierta de cintura para abajo por una impecable cola escamosa. Todo en ella era hermoso. Abrió la boca dejando escapar un armonioso canto. Bellatrix se tapó los oídos intentando esquivar la mortal canción pro los marineros no corrieron la misma suerte, hundiéndose hasta desaparecer de la vista de la bruja. La sirena dejó de cantar y esta ve lanzó el más desgarrador de los alaridos. Lo que una vez fue una hermosa canción se había convertido en el peor de los ruidos. Agarró a uno de los marineros, arrastrándolo hasta las profundidades del mar. Bellatrix se incorporó presurosa de salir de allí antes de que la sirena regresase con sus infernales cantos hasta conducirla a una inevitable y dolorosa muerte.

autor: Carmilla